COMITÉ DE EMPRESA GLOBAL (SALCAI-UTINSA S.A.)
Economía
05/10/2008 Actualizada a las 11:22
Mar de dudas ante el 'crash'
Francisco Suárez Álamo Las Palmas de Gran Canaria
El crash -el término crack ya no se emplea para las crisis- de esta semana sume a más de un ciudadano en un mar de dudas. Los economistas sólo se ponen de acuerdo en una cosa: la gravedad de la crisis. A los partidos les cuesta también articular el consenso.
05/10/2008 Actualizada a las 11:22
Mar de dudas ante el 'crash'
Francisco Suárez Álamo Las Palmas de Gran Canaria
El crash -el término crack ya no se emplea para las crisis- de esta semana sume a más de un ciudadano en un mar de dudas. Los economistas sólo se ponen de acuerdo en una cosa: la gravedad de la crisis. A los partidos les cuesta también articular el consenso.
En ese contexto, CANARIAS7 intenta hoy responder a algunas de las muchas cuestiones que en estos días de tensiones económicas se pueden estar haciendo los lectores. No parece que haya recetas ni varitas mágicas, y no parece que la histeria esté tampoco justificada. La preocupación, sí; sin duda.
1.¿Se acaba la crisis con el plan financiero aprobado en Estados Unidos? No. Ni mucho menos. En todo caso, el citado plan, que pasa por la inyección de 700.000 millones de dólares de dinero público para la salvación de empresas privadas, busca devolver la tranquilidad a los mercados y garantizar que haya liquidez en el sistema financiero, pues el gran problema sigue centrado en ese punto: falta dinero en los bancos, el que en encuentran es caro, no pueden financiar la inversión privada, lo que se traduce en un descenso en la creación de empleo y, en consecuencia, en un bajón del consumo, con lo que la pescadilla se vuelve a morder la cola, pues ni hay dinero en el sector financiero ni se mueve dinero en las economías domésticas.
2. ¿En qué consiste exactamente lo aprobado en Estados Unidos? El Acta de Estabilización Económica de Urgencia de 2008, que es como se llama en realidad el paquete de medidas aprobado, tiene como eje central que el Tesoro -equivalente al Ministerio de Economía y Hacienda- puede adquirir la deuda de mala calidad de los bancos por importe de 700.000 millones de dólares. Se entiende como deuda de mala calidad aquella que derivará en impagados, pues quien la ha contraído muy difícilmente podrá hacer frente a ella. En primera instancia, esa deuda se vinculó a la actividad inmobiliaria, con esas hipotecas de alto riesgo a clientes casi sin garantías (las famosas subprime), pero el mal se ha contagiado a otras actividades. Por eso, entre otras causas, se produjo el hundimiento de bancos de inversión tan relevantes como Lehman Brothers. El Acta de Estabilización incluye también, entre otras, estas medidas: se eleva de 100.000 a 250.000 dólares la garantía que se aplica a los depósitos de los clientes bancarios cuando una entidad se ve abocada al cierre o la quiebra; millones de contribuyentes se ven liberados de pagar un impuesto llamado Tasa Mínima Alternativa; se conceden desgravaciones y otros incentivos a empresas o particulares que inviertan en energías renovables o en la compra de coches ecológicos; se fijan exenciones fiscales a empresas que inviertan en investigación y desarrollo y a los pequeños comercios y restaurantes que realicen mejoras en sus servicios; y se da poderes a la Comisión de Valores para prohibir prácticas que hasta la fecha permitían inflar el valor teórico de las empresas, así como prácticas financieras de alto riesgo.
3. Si el problema nace en Estados Unidos, ¿por qué hay tanta preocupación en Europa? Porque una de las consecuencias de la economía global es que el mercado financiero es probablemente uno de los más internacionalizados. Así, los grandes bancos que se han visto afectados en Estados Unidos tenían relaciones financieras y comerciales con otras entidades financieras de Europa. El dinero ya no tiene patria y, en paralelo, las crisis tampoco.
4. ¿Hay riesgo de quiebras bancarias en Europa? No se puede generalizar en la respuesta. Es cierto que hay entidades financieras en apariencia tan fuertes como el Fortis Bank, del Benelux, que han tenido que recurrir a la ayuda pública para garantizar su futuro. Lo mismo ha sucedido en el Reino Unido, donde sin embargo una entidad española -Santander- no sólo mantiene su apuestan por el mercado británico, sino que aprovecha las aguas revueltas actuales para aumentar esa presencia. La reunión celebrada ayer en Francia, a instancias del presidente Nicolás Sarkozy, pretende, por un lado, trasladar la calma a la ciudadanía y estabilizar los mercados bursátiles, pero también reflexionar sobre la necesidad de introducir modificaciones en los mecanismos de control financiero para evitar que las crisis bancarias se multipliquen en el Viejo Continente. De hecho, si algo ha puesto de manifiesto esta crisis es que los mecanismos de supervisión han fallado, así como que grupos de trabajo como el G7 (los siete estados más industrializados del planeta) o el Fondo Monetario Internacional no han estado a la altura de las circunstancias, pues o no vieron venir el tsunami financiero o no lograron contenerlo.
5. ¿Y en España? ¿Cuál es el estado de salud del sistema financiero? En términos generales, no hay motivo para una alarma inminente. Cabe recordar que España ya pasó por un trauma financiero cuando la intervención de Banesto, una decisión que, polémicas al margen sobre si estaba o no politizada, sirvió para fijar nuevas reglas del juego y se llevó a cabo sin apenas daños para quienes tenían depositado su dinero en la citada entidad. La Asociación Española de la Banca ha insistido esta semana en que las entidades financieras están saneadas, lo que no evita para que padezcan el mal generalizado de los bancos y cajas en estos momentos: no encuentran liquidez y, además, el Banco Central Europeo se resiste a bajar los tipos de interés por miedo al impacto de la inflación. No conviene olvidar este punto porque es otra de las claves que agrava la crisis actual: no hay consumo pero los precios no bajan, influidos en primera instancia por el encarecimiento del petróleo en los meses precedentes.
6. ¿Qué es el Fondo de Garantía de Depósitos y por qué se ha abierto el debate sobre la variación de las cantidades fijadas? Por resumirlo, es el mecanismo que garantiza recuperar al menos una parte del dinero si un banco va a la quiebra. En la actualidad, dicho fondo garantiza en España la recuperación de 20.000 euros por persona. El debate sobre la modificación de esa cuantía se ha abierto después de que algunos países europeos lo hayan modificado al alza, como fue el caso de Irlanda, con el argumento de devolver la tranquilidad a los ciudadanos. No parece que en breve vaya a ser modificada en España esa cifra, sobre todo porque hacerlo ahora sí que sería dar la razón a quienes sospechan que hay entidades que pueden quedarse sin capacidad de devolver los ahorros a los impositores.
7. ¿Cuánto dinero hay ahora en el Fondo de Garantía de Depósitos? Unos seis mil millones de euros entre bancos, cajas de ahorros y cooperativas de crédito.