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El Gobierno estudia los primeros informes de las grandes reformas
EL ECONOMISTA
El Consejo de Ministros estudiará hoy los primeros informes de las tres grandes reformas estructurales -la laboral, la financiera y la de estabilidad presupuestaria- que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha comprometido a aprobar en las tres próximas semanas, antes del 10 de febrero, según informaron a Ep fuentes gubernamentales.
Estos informes fueron el contenido fundamental de la Comisión Delegada para Asuntos Económicos que ayer presidió Rajoy por primera vez desde que fue investido presidente, reunión en la que urgió a su equipo económico a ultimar el contenido de las tres leyes.
El jefe del Ejecutivo ya anunció el pasado martes que elConsejo de Ministros de hoy no llevaría un proyecto de ley sobre la reforma laboral, una vez fracasada la negociación con los agentes sociales.
Sin embargo, sí se marcó el calendario de actuación del Ejecutivo y lo hizo ante el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, en lo que se entendió como un compromiso formal del Gobierno en el ámbito internacional con las reformas estructurales teniendo en cuenta las importantes citas de los próximos días.
Las tres fechas clave
El presidente del Gobierno fijó como la primera fecha clave el 27 de enero teniendo en cuenta que el jueves 26, Rajoy viaja a Alemania para reunirse por primera vez como jefe del Ejecutivo con la canciller, Angela Merkel, a la que podrá presentarle la reforma o las reformas que recibirán luz verde al día siguiente.
Cuatro días después, el día 30, acudirá en Bruselas a su primera cumbre europea que tiene en el orden del día el empleo y la reforma del Tratado Europeo para incorporar la regla de oro -de límite de gasto- a las Constituciones. Estas citas hacen presuponer que Moncloa llamaría a acelerar las reformas laboral y de estabilidad con la vista puesta en Bruselas.
De cumplirse este calendario que no confirman en Moncloa, en los Consejos de Ministros del 3 y el 10 de febrero debería aprobarse la reforma financiera. Precisamente, fuentes financieras informaron horas antes de que se celebrara la Comisión Delegada de que el Gobierno planea suavizar el impacto que tendrá en la banca el endurecimiento de las provisiones para cubrir el agujero de los activos inmobiliarios en sus balances.
La fórmula que está encima de la mesa pasa por que las provisiones se carguen contra el capital y contra la cuenta de resultados, lo que obligaría a parte del sector a entrar en pérdidas.
