viernes, 20 de enero de 2012

LAS CIFRAS DEL ADIÓS DE LUZÓN - Santander acepta la renuncia de su número tres, Francisco Luzón, que recibirá 70 millones de euros.

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Una prejubilación de 70 millones

EL ECONOMISTA

El Santander ha aceptado la renuncia voluntaria de su número tres, Francisco Luzón, después del pacto alcanzado con Emilio Botín en los últimos días. El consejo de administración aprobará definitivamente el lunes el retiro del consejero ejecutivo y máximo responsable del grupo en Latinoamérica, para lo que se acogerá a una prejubilación, al contar en la actualidad con 64 años de edad.
La marcha de Luzón le costará al banco en torno a unos 70 millones de euros, que ya han sido dotados. Estos emolumentos corresponden en su mayor parte al plan de jubilación, que ha ido acumulando desde su incorporación al banco en 1996. En concreto, 56 millones. El resto son 10 millones en concepto de seguros; 2,8 millones, que pueden ser en acciones o en efectivo, por la prejubilación durante un año; y otro 1,1 millones por un complemento a la pensión, teniendo en cuenta las condiciones de su contrato laboral, de las que da cuenta públicamente la entidad.
El consejero ejecutivo era hasta la fecha una de las personas de confianza de Botín, siendo el artífice de la expansión de la entidad en Lationoamérica, principalmente en Brasil. En un comunicado, el banco expresó el reconocimiento a su labor profesional, "decisiva para la construcción de la franquicia" al otro lado del Atlántico.
Por su trabajo, era el segundo directivo que más cobraba al año. Su salario sólo era superado por el consejero delegado, Alfredo Sáenz. Luzón percibió en 2010 una remuneración total de 5,6 millones.
La salida de Luzón estaba fijada en el calendario desde hace varios meses. Tal es así, que en noviembre recibió la medalla al Mérito en el Trabajo por parte del Consejo de Ministros, distinción que se otorga a las personalidades que han abandonado sus cargos o tienen previsto hacerlo.

Los retos del sucesor

Luzón será sustituido por su mano derecha, Jesús Zabalza, que hasta ahora se encargaba de la dirección general de la División América. Si bien, éste no será nombrado consejero ejecutivo del grupo, puesto que queda vacante.
Zabalza se incorporó al Santander en 2002. Desde entonces ha trabajado codo con codo con Luzón. Anteriormente, fue director general adjunto de La Caixa, donde pilotó la expansión de la caja fuera de Cataluña.
A partir de ahora, tendrá que culminar en primera línea la expansión puesta en marcha por su jefe. Entre los planes del banco están el aumento de la cuota de mercado en Brasil, un país clave para la cuenta de resultados del grupo. Otro de los retos será la colocación en bolsa de la filial argentina y el despliegue de los acuerdos alcanzados con el fondo de Qatar para esta región.
Luzón tomó las riendas de la división latinoamericana del Santander en 1999, después de haber desempeñado durante tres años el cargo de director adjunto al presidente y ser el responsable de Estrategia, Comunicación y Relaciones Institucionales. Procedía de Argentaria, entidad pública, que con la llegada al poder el PP fue destituido y sustituido por Francisco González, actual presidente de BBVA. Inició su carrera profesional en Banco de Vizcaya en 1972, en el que participó de la fusión con el Bilbao, dieciséis años después, junto con Alfredo Sáenz.
Poco después el entonces ministro de Economía, Carlos Solchaga, le designó presidente de Banco Exterior con el propósito de que llevara a cabo la integración de éste con el Argentaria.
En la actualidad, el directivo es consejero externo de Inditex, vicepresidente mundial de Universia y vicepresidente segundo del Real Patronato de la Biblioteca Nacional.

Contribución de la región

Cuando tomó las riendas del Santander en Latinoamérica, esta división aportaba al grupo apenas 546 millones de euros. En 2010, el beneficio de esta división alcanzaba los 4.804 millones, el 45 por ciento de las ganancias totales de la entidad cántabra. En concreto, uno de los países de la zona, Brasil, se ha convertido en el motor del Santander. El 25 por ciento de los resultados provienen de la nación carioca.
Luzón fue el encargado de llevar a cabo la relevante la adquisición de Banco Real a ABN Amro en 2007, lo que convirtió a la entidad española en el tercer agente financiero de Brasil. Lideró durante varios años la integración de Real con Banespa -la antigua filial del grupo español en este país-.
Bajo su dirección en Lationamérica también destaca su posicionamiento fuerte en otros estados, como en México, Chile o Argentina. Y a él le tocó pilotar las negociaciones para la expropiación del Santander en la Venezuela de Hugo Chávez.
La pujanza de esta franquicia y su relación personal con Botín le posicionaron como uno de los candidatos a suceder a Alfredo Sáenz antes de que el Gobierno le concediera el indulto. Incluso en el cuartel general del banco, en Boadilla del Monte, se daba por hecho que estaba en las quinielas para suceder al mismísimo Emilio Botín en un futuro, a través de un proceso ordenado.