Adjudica el proyecto geotécnico a tres empresas expertas en túneles
El Cabildo da otro empujón al tren
| Canarias7 |
Prototipo de tren expuesto por el Cabildo de Gran Canaria. QUESADA
El consejo de administración de Ferrocarriles de Gran Canaria adjudicó ayer el proyecto geotécnico del futuro tren del Sur a la UTE formada por las empresas Inuterma, Subterra Ingeniería e In Situ Testing, que supone "un nuevo avance" en la pretensión del Cabildo de conseguir la financiación del Estado e iniciar las obras lo antes posible, señaló ayer su vicepresidente Román Rodríguez.
La contratación, por un importe de 502.024 euros, recayó por unanimidad en una UTE de tres empresas radicadas en Madrid y especializadas en geotecnia subterránea para lineas ferroviarias, alta velocidad y autopistas. Estas sociedades ya han trabajado en la Península y Sudamérica para las grandes empresas españolas de la construcción.
El proyecto geotécnico es el primero que se realizará sobre el trazado previsto entre Las Palmas de Gran Canaria y Maspalomas, que en gran parte discurrirá por túneles y viaductos. Hasta ahora la propuesta de crear un tren se sustentaba en los estudios para la elaboración del Plan Territorial. Una vez aprobado dicho planeamiento por el Cabildo y por el Gobierno de Canarias, con este proyecto y el de la cartografía, ya adjudicado a Grafcan por 300.000 euros, "empieza en realidad la construcción del tren", explicó el coordinador de Obras Públicas del Cabildo, Rogelio Frade.
El siguiente paso, pendiente de la firma del convenio con el Ministerio de Fomento, es adjudicar los proyectos constructivos de la obra civil, divididos en siete tramos. Después vendrán los proyectos de las once estaciones y las cocheras, para finalizar con los tres referentes a las vías, la electrificación y la seguridad.
GASTOS. Los primeros estudios para la implantación del tren entre la capital y el Sur proceden del año 1996, en la etapa en que el Cabildo estaba presidido por José Macías, que fueron continuados en el mandato de María Eugenia Márquez. Además, la corporación insular planificó a mediados de los años noventa un metro ligero para la capital grancanaria. Se hizo un estudio, por valor de 8 millones de las antiguas pesetas, para crear un linea entre la plaza de Manuel Becerra y Hoya de la Plata, con una ramificación desde la Base Naval hasta el Auditorio.
El Ayuntamiento capitalino, entonces dirigido por José Manuel Soria, descartó la construcción de ese metro ligero.
