SIALSA: La última traición del Cabildo de Gran Canaria
La pasada semana se consumó la traición. A pesar de las promesas del Presidente José Miguel Pérez y de su consejero de agricultura Demetrio Suárez, el Cabildo de Gran Canaria renunció al 5% que aún poseía del capital social de esta empresa insular, que Soria privatizó en 2005 por 12 millones de euros.
Era ese 5% precisamente el que hacía posible que se tuviera que contar con el voto de la Corporación Insular para modificar las dos condiciones que se establecieron en el momento de la venta de la empresa mediante concurso público: 1) La compra obligatoria de la totalidad de la leche ofertada por los ganaderos de la Isla, a precios de mercado y 2) El mantenimiento de la plantilla de trabajadores.
A partir de ahora, el grupo KALISE-MENORQUINA, propietario único desde este momento de esa empresa, puede hacer y deshacer a su antojo lo que le convenga, perdiendo eficacia las dos condiciones impuestas cuando se le adjudicó, al renunciar el Cabildo a su tutela. Rebelarse frente a la traición es tarea a la que no deben renunciar los ganaderos grancanarios, los trabajadores de la empresa, los tribunales de justicia y la ciudadanía en general